4:30 PM
El niño de cuatro años, hacia la esquina de una pared, con las manos en la frente, apenas conteniendo la risa.
-1… 2…
-¡Cuenta hasta treinta amor, hasta treinta! -dice su madre desde algún lugar de la casa.
-…
-¡Amor, hasta veinte! ¡Cuenta hasta veinte!
-Bueno, 1… 2… 3… 4…
Y su madre sabe dónde esconderse.
-5… 6…
Es una casa muy grande, en el campo, rodeada de campos de girasoles que ahora están desiertos, sin lluvia que riegue, sin trabajadores que echen semilla en tierra.
-7… 8…
Hace un rato se había escondido en el baño, si se esconde allí, la encontrará muy pronto. Quiere darle un reto a su hijo.
-9… 10…
A esta hora del día -las 16:30 en el reloj de la cocina- el viento es muy fuerte. Las múltiples ventanas conservan la casa fresca. Los árboles se agitan afuera. Quizá es una casa muy grande para ella y su hijo.
-13…
-¡Corazón, once, sigue el once!
-11… 12…
Debe aprovechar al máximo el tiempo en esta casa; es cuarentena nacional, pero cuando no lo sea tendrá que trabajar de nuevo en la ciudad y ver a su hijo en la noche, casi a la hora en que debe arroparlo para dormir.
-13… 14…
No hay mejor lugar para esconderse. Si no la encuentra y comienza a llorar al rato, ella gritará, sí, ya lo pensó, gritará “aquí estoy amor mío, no llores, aquí estoy”.
-15…
En la habitación del fondo, junto al inmenso armario viejo, hay un espacio. Entra solamente su delgado cuerpo quedando apretada, casi invisible con una columna que sobresale y le oculta mejor.
-16…
Pero su hijo no es muy listo, sería mejor esconderse debajo de la cama.
-17…
No, ya está ahí. Ahí se quedará. Si no la encuentra, ella va a gritar.
Mucho frío, cuando salga del escondite va a cerrar las ventanas.
-18…
A ella le gusta jugar.
Su corazón está alegre.
Sus pulmones se detienen.
-19… ¡Ve-in-te! ¡Mamá voy por ti! ¡Voy por ti mamá!
El viento sopla y termina cerrando las puertas de los armarios y descuelga la ropa del tendero.